Sunrise Sherbert
Sunrise Sherbert desarrolla plantas que crecen con mucha fuerza en la fase vegetativa. Desde el principio su estructura se presenta sana y fuerte, con muchas ramas y con hojas tipo indica. Durante esta fase concentran todos sus esfuerzos en configurar una estructura muy potente, por lo que el estiramiento es más lento de lo habitual, pero cuando pasan a la fase de floración pegan un increíble estirón, pudiendo aumentar su tamaño hasta un 30%. Y ya, alcanzado el apogeo de la floración, nos encontramos con cogollos homogéneos y extremadamente resinosos.
Sunrise Sherbert es una planta que se puede cultivar en cualquier lugar, ya que siempre sabe cómo ingeniárselas. Lo único que pide es una alimentación completa y abundante para satisfacer su irrefrenable necesidad de comida. Si queremos que las flores alcancen su máxima expresión en todas las capas, será imprescindible quitar hojas en la parte alta de la planta, en la fase de floración, cuando estas impidan que la luz y el aire puedan acceder hasta las flores de las capas inferiores. No hay que olvidar que las plantas deben tener la suficiente capacidad de sujeción cuando las flores estén en su máximo esplendor. Una buena opción es colocar un enrejado alrededor de cada planta. Y para que puedan crecer a sus anchas, se recomienda el cultivo de unos 6 a 9 ejemplares por m2. Si sigues estas sencillas pautas de mantenimiento, todo apunta a que disfrutarás de un producto excepcional, de nueva generación, creado por los más expertos breeders californianos.
Sunrise Sherbert es una buena alternativa para acabar el día plácidamente. Su aroma es excepcional; pimienta, limoncillo, frutos rojos, lavanda, notas a limón dulce, y madera de pino. Además, las sensaciones que produce, tanto a nivel mental como corporal, compaginan potencia psicodélica y relajación. ¡Una hierba al más alto nivel al alcance de todos!