Trabajadores chilenos buenos pa´ la weed

Muchos debate y mesas redondas adornaron la palestra chilena el año pasado, sobre todo el debate sobre el consumo de marihuana a nivel social. No solo en Chile, en el mundo se abrió este tema como punto central en el desarrollo medicinal alternativo y como estandarte de lucha por los derechos humanos y las libertades sociales.

“Libertades”, frente a este punto es que se enfrentaron muchas perspectivas con respecto al uso de la cannabis en sus múltiples funciones y formas de consumo.

Sin embargo como todo tiene que ser controlado y medido, se realizó la cuarta versión del estudio “¿Su empresa da positivo?: Testeo de alcohol y drogas en trabajadores chilenos” dando a conocer que la marihuana es la droga más consumida por estos, alcanzando el 7,1 del porcentaje total de consumidores de drogas lícitas e ilícitas.

50 por ciento de trabajadores sometidos a test arrojan consumo de marihuana

12,1 % es el total de los consumidores de alguna droga del cual se desglosan los siguientes resultados: El consumo de drogas en general aumentó en un 2%, el consumo mayor es de marihuana y representado por el 7,1%, seguido por la cocaína con un 1,91% y en tercer lugar se observa el consumo de benzodiacepinas con 1, 73%.

Patricio Labatut, Gerente general de Global Partners, empresa a cargo del estudio, cree que la desinformación y el aumento del consumo de cannabis están ligados, ya que por falta de información la gente cree que su consumirla es “poco peligroso”. “Los resultados muestran, una vez más, que es importante realizar un trabajo de información sobre las consecuencias que puede traer su consumo en las empresas, una arista que ha quedado fuera de la discusión política en nuestro país”. Agregó Labatut.

Las actividades laborales en que se eleva el porcentaje son: la actividad económica que da más resultados positivos es el sector Comercio, con un 15,38%. Lo sigue Transporte, con un 11,94% e Industria y Manufactura, con un 9%.

Para el 2017 se pretende implementar narcotest a los conductores, control que según Patricio Labatut es necesario para evitar accidentes que ocurren por el consumo de drogas. A su vez señala que “Sin esta fiscalización no podemos saber si el conductor del Transantiago, taxista, o la persona que maneja al lado de uno está bajo la influencia de las drogas, poniendo en riesgo su propia vida y la de los demás”.

Los trabajos y la demanda productiva de las grandes ciudades. Los tiempos irreales, el no espacio para el descanso y el ocio, mirados como inutilidad de producción, la alimentación industrial y de mala calidad, son algunas de las aristas que potencian el consumo de drogas, de multivitamínicos, energizantes, relajantes, etc. Alguna pastillita que ayude a sobrellevar la vida en estas condiciones.

Foto: Claudio Calozzi